Hay miradas que revelan asuntos imposibles

Hoy me tope con una niña hermosa, tenía unos increíbles ojos negros, una mirada tan profunda e inocente y un semblante tan puro y bello, todo para ti es bello y hermoso, algo nuevo e increíble; aunque ella se encontraba lejos de mí, nuestras miradas se cruzaron y coincidieron un instante, una sonrisa se dibujo en nuestros labios y los ojos crearon un diálogo perfecto, un lenguaje completo aún sin palabras, uno que ambos entendimos inmediatamente; así estuvimos a la distancia, mirándonos sin cruzar palabra, esquivando y encontrando nuestras miradas una y otra vez, fingíamos no vernos, pero sabíamos perfectamente que el uno al otro se observaba con unos ojos que revelaban asuntos imposibles por ahora; yo te observaba con unos ojos de amor que no cabían en mi, aún no me corresponde sentir esto y tú, no sé que reflejaban tus fantásticos ojos negros, imagino que algo bello también, lástima que no puede ser, no por ahora, tal vez el futuro me dé la oportunidad, no lo sé, eso será después, primero necesito encontrar una madre para después engendrar a una niña como tú, tan bella, tan tierna e inocente, tan viva y tan pura, tan llena de esperanzas, sueños y llena también de un futuro, uno en el cual yo seré tú pilar, tú base y tú soporte, tú mejor amigo, tú confidente, tú compañero de travesuras y tú cómplice en esta vida llena de aventuras, se que aprenderé de ti, tanto o más como tú de mi; en resumidas cuentas seré tú padre, te amare más que a mi propia vida y daré todo de mi para que a ti no te falte nada. Perdóname, pero sé que cometeré errores, eso no lo podré evitar, actuare de formas que no comprenderás o no entenderás completamente, pero estoy seguro que todo lo haré por tú bien, y en el momento indicado entenderás mi accionar y sabrás que todo lo hice por ti y para ti. Pero por ahora sólo me resta buscar a la mitad que me tiene la vida preparada para poder completarte y traerte a mi lado, esa mitad que me complementará y quién estará dispuesta igual que yo por ver tú bienestar, tú madre, se que ella te amara igual o más que yo, ella te traerá a este mundo y sufrirá para que tú llegues sana a nuestro lado; hasta entonces pequeña, aquí te estaré esperando.